"Piedra" para bisutería hecha de papel

Hoy os traigo una técnica para fabricar lo que podemos llamar una "piedra" para hacer bisutería. En este caso yo he hecho dos y las he usado para hacer unos anillos, pero igualmente sirven para pendientes, colgantes, etc. Pasemos al trabajo...

Los materiales que necesitamos son los siguientes:

- Papel de un libro viejo (no rompáis nunca un libro de lectura.... ) yo uso un diccionario que mi hijo tenía cuando era pequeño en primaria y que hizo añicos antes de terminar, jajaja. Sirven también papeles de periódicos y de revistas.

- Cartulinas de varios colores. En este caso yo he usado una gana de azules, malvas y verde pistacho. Pueden ser menos colores, por supuesto, no son necesarios tantos

- Tijeras

- Cola blanca  de la que se queda transparente cuando seca

- Lija

- Opcional, un buen cutter y barniz brillante

Cortamos trozos de similar tamaño de las cartulinas y de los papeles del libro. De este último hemos de tener el doble de grosor que lo que abultan las cartulinas unas sobre otras.

 Intercalamos una cartulina (yo al principio puse dos juntas), un taco de papel, otra cartulina, y así sucesivamente hasta terminar todo.

En este paso lo que hacemos es pegar entre sí cada hoja una a una. Extendemos bien una capa fina de cola en la primera cartulina, y le vamos pegando encima los papeles y cartulinas restantes. Es un paso pesado éste, pero creo que el final merece la pena.

Éste es el resultado final con todas las cartulinas y papeles pegados entre si. No hace falta que queden todos parejos, porque luego los bordes van a desaparecer.

Así queda nuestro taco de papeles y cartulinas. Dejamos secar bien, es importante. 

 Al final, dividí el trozo que habéis visto en las fotos anteriores en cuatro partes para hacer más de una "piedra". Dibujaremos en la cartulina de arriba una forma similar a lo que queramos que sea la piedra y pasaremos la lija por los laterales de forma diagonal para que se vean las diferentes capas. Yo, en esta foto y para hacerlo con más rapidez, me ayudé de un cutter. Si tenéis dominio de su manejo, estupendo, si no, mejor usáis la lija que es menos peligrosa. 

 Y así queda nuestra piedra lijada. La forma inicial la he ido cambiando conforme me parecía que me gustaba más, jajaja, eso tiene no tener las cosas claras. El resultado de esta piedra me gusta al final. Queda mucho polvo del papel lijado en los laterales de la "piedra", con un cepillo o un pincel de cerdas gruesas, cepillamos para quitarlo. 

 Con otro trozo de los que corté de nuestro taco de papeles, empecé a darle forma irregular, pero esta vez sólo usé sólo el cutter, para dar un aspecto muy irregular.

 Estas son nuestras piedras. A la de la derecha todavía le daré un corte más, jeje, porque la forma no me convence todavía. Después de quitarles el polvo, le di dos buenas manos de cola transparente que las protegerá. Es importante darle bien la cola. Ya de por sí, la cola le da un brillo muy atractivo, pero si queréis, le podéis poner un barniz brillante encima, aunque no es necesario.

Aquí os enseño cómo han quedado mis piedras pegadas ya en unos soportes para anillos. Para darles un poco más de atractivo, les salpiqué unas pintas de oro al alcohol. Tengo que reconocer..... que esto último lo hice porque por las prisas de poder tirar las fotos, no apliqué bien la cola, y luego, al echarles barniz, se me mancharon las piedras. Pero he procurado aprovechar el error para que el trabajo quede más bonito e interesante. Y como no lo va a saber nadie.... 

Cuando haga más piedras de estas en otros soportes para bisutería ya podré fotos. Espero que os haya gustado y os animéis a hacer vosotros otras bien bonitas.