23 mayo 2014

Cajita de metal reciclada

Hola amigas y amigos!!. Hoy vamos a hacer una cajita forrada que puede servir muy bien para pequeños regalos, para guardar cosas o simplemente como adorno. A mí, me encanta las cajas e intento aprovechar cualquiera de ellas que veo. Yo tengo una en la que guardo unas tarjetitas  para dibujar zentangles
que llevo a sitios donde tengo que esperar y unos rotuladores para dibujarlos. Uso cajitas de tabaco que me da un familiar. Pueden hacerse con cualquier tipo de cajas metálicas, y mejor que no sean de tabaco, jeje, como las de caramelos, por ejemplo.... Bueno, pues vamos a ponernos manos a la obra!!


Los materiales:
- Una caja metálica
- Papeles de scrap. Estos que he utilizado yo son de una página donde los puedes imprimir. Pondré enlaces más adelante. Pueden servir papeles que tengamos por casa de regalos o de envolver.
- Regla
- Cinta adhesiva de doble cara
- Cutter o tijeras
- Tinte. Éste me lo fabrico yo, con un poco de pintura muy diluida en agua. Se pueden usar de tampón, por supuesto, pero yo no tenía de este color para este proyecto y me lo fabriqué. jeje
- Esponjita para aplicar el tinte. Yo usé una de aplicar crema a los zapatos, aunque sirve cualquiera.


Vamos a forrar la caja primero por dentro. para ello, como es difícil de calcular la medida exacta del papel, lo que hacemos es dibujar la base en el papel escogido como veis en la foto. La recortamos y le quitamos una pequeña tira como de un mm por cada lado para salvar el grosor del metal de la caja. La probamos siempre antes a ver si encaja dentro de la base, y si no es así seguimos recortando un poquito hasta que quede perfecta. Ponemos cinta adhesiva de doble cara en el reverso del papel recortado.



Yo olvidé en la foto repasar los filos con un poco de tinte. Esto se hace de la siguiente forma, se aplica el tinte en la esponjita y retiramos el exceso. Luego pasamos la esponja por los filos del papel recortado para que tome unos tonos como de papel envejecido. Finalmente pegamos el papel en el fondo. Suelo poner la cinta de doble cara pegada a los filos y un trozo en medio. Para no equivocarme en la forma de pegarla, coloco el papel primero, y cuando está en su sitio, retiro el papel removible de la cinta de uno de los filos y pego esa parte sin levantar el papel de su sitio, es decir lo sujeto bien con las manos para que no se mueva. Luego voy retirando los papeles del resto de filos y del centro, con la garantía de que ya no se va a mover el papel de su sitio. Uf........ espero haberme explicado bien!


Después pasamos a forrar el filo de abajo. Para tomar la medida del interior, usamos una tira de papel, o un metro de costurera. Si usamos la tira, marcamos la medida y luego sobre una regla podemos ver cuántos cm necesitamos para el papel. Cortamos el papel que hayamos escogido, le ponemos cinta y finalmente lo pegamos en su sitio. Hay que tener cuidado de que no nos salgan arrugas. Podéis usar el truco que os he señalado anteriormente y si hemos de levantar el papel, se hace sin problemas, de forma que quede bien pegado y en su sitio. Si sobra un poco por fuera, pasamos el cutter o recortamos el extremo con las tijeras. Por último aplicamos tinte en los bordes. Yo lo hago una vez pegado, por si acaso he tenido que recortar algo del exceso.

De la misma forma que hemos forrado la base de abajo de la caja pasamos a forrar el interior de la parte de arriba, pero con la salvedad del filo, que es tan pequeño que queda muy bien en los tonos dorados que tiene el metal de la caja, tal cual. Además como ésta encaja en la parte de abajo, el papel podría arrollarse y el efecto sería desastroso.

Pasamos a forrar el exterior de la caja. Empezamos por el borde de abajo. Tenemos cuidado de cortar el papel desde el filo de la tapa de la caja, para ello tomamos la medida con la caja cerrada. Así, al abrir y cerrar la caja, no se arrugará el papel. Cortamos, ponemos cinta y a pegar!!

Dibujamos el perfil de la parte baja y de la parte de arriba sobre el papel y recortamos. Ponemos la cinta de doble cara por detrás y pegamos cada pieza en su sitio. Recortamos bien con la tijera si queda alguna rebaba de papel. Finalmente, pasamos la esponjita con el tinte por los bordes tanto inferior como superior.

Este es el aspecto que tiene la caja casi a punto de terminar. Le añadí un filo azul con lunares en el los laterales porque el otro papel, se quedaba un poquito corto, pero el resultado me gusta mucho más ahora

Esta es la decoración que he escogido para decorar la caja. Aunque al final, puse otro elemento en la tapa que no tiene nada que ver con éstos, pero que queda igualmente bonito.

Y este es el resultado final. Como he dicho antes, escogí un elemento diferente para la decoración, que es esta rosa de la que haré un tutorial más adelante.
Os animo a que practiquéis el reciclaje de objetos que generalmente tiramos a la basura. Es muy gratificante conseguir cosas tan bonitas de algo que íbamos a tirar, no creéis??

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